sábado, 12 de diciembre de 2009

Volando entre ideas: Cazadores de Sombras II

- Que terriblemente conveniente para ti, no obstante. Y para él. No tendrá que preocuparse de que cuentes sus secretos.
- Claro, le aterra que le cuente a todo el mundo que en realidad siempre ha querido ser una bailarina de ballet.
- Creía que tú estabas del lado de los de "vaya directamente a la cárcel, sin pasar por la Salida, y sin cobrar los doscientos dólares".

Sí, es Jace. Sus diálogos son sencillamente geniales durante todo el libro, ingeniosos, divertidos, no sin cierta mala leche... Y es eso lo que le convierte en un personaje tan especial (sí, vale, y el hecho de que sea un canalla endemoniadamente angelicalmente guapo). Ojalá hubiera marcado un par de frases suyas del primer libro, peeeero...

- No dejo de pensar en sangre – siguió Simon -. Sueño con ella. Me despierto pensando en ella. Muy pronto estaré escribiendo emotiva poesía morbosa sobre ella.

Lo admito. Reconozco que en la primera parte le tenía un poco de manía, por soso y por estar en medio siempre, pero en Ciudad de Ceniza su historia, su encanto y su humor kosher me han conquistado. Ya estoy deseando que llegue City of Fallen Angels, cuarta parte de la saga de Cazadores de Sombras, que estará narrado bajo su punto de vista (y eso que aún no tengo el tercero... ¿Quién será el tal Sebastian?).
- ¿Cuantos años tienes, de todos modos? - preguntó, curiosa.
Magnus le guiñó un ojo.
- Yo ya estaba vivo cuando el Mar Muerto era sólo un lago que se sentía un poco pachucho.
Clary puso los ojos en blanco.


Otro al que adoro. Es tan peculiar que es imposible que te sea indiferente. Descarado y pasota, al menos en apariencia, porque también tiene su lado tierno... Estos tres se reparten los mejores momentos del libro, junto a alguno protagonizado por Alec e Isabelle y las interesantísimas incorporaciones de Maia (quien hace una exactísima descripción de Jace) y la Inquisidora. Bueno, y Luke, que también siento debilidad por él. Pero Clary está de un pavisoso en este libro... La pobre sufre de una terrible enfermedad a la que, en una ida de olla total, he llamado SPP: Síndrome del Protagonista Pasivo (o Panoli, lo que se prefiera), pero ya os hablaré de este misterioso mal más adelante.

Os dejo con una última cita:
- Es una idea fabulosa - Jace volvió a dejar caer el papel sobre la mesa y empezó a quitarse la cazadora -. Tengo una estela que podemos usar. ¿Quién quiere hacérmelo?
- Un lamentable uso de palabras - masculló Magnus.

¿Veis porque adoro a Magnus? XD

2 comentarios:

Iraya Martín dijo...

xDDDDDDDDDDDD ES GENIAL, es que leo y releo las citas del libro y siempre me muero de risa. Oh y la descripción de Maia sobre Jace... waaaaa más que acertada. ¿He dicho ya que adoro estos libros?

¿Qué me dices de los 15 cm de Isabelle? ¡Qué tía!

Rogue Lily dijo...

Oh, me había olvidado de la de Isabelle jajaja
Si es que casi se podría citar el libro entero, como el primero, me acuerdo que le decian a Jace algo así como que se quería mucho a sí mismo y él contestaba "Sí, pero de vez en cuando me rechazo, para mantener el interés" xD
Estoy seriamente tentada de empezar el tercero aunque sea en ingles y tenga que estar pegada al traductor de Google todo el rato...